Con motivo del estreno de su última película, "El Árbol de la Vida", trataremos de dar sentido al por qué de que, el que aún es uno de los hombres más sexys del mundo, haya decidido enfrascarse en un proyecto tan polémico y facil de tachar como una película solo apta para un reducido público.
Desde sus comienzos, este guapo universal ha tenido que luchar contra el handycap de ser simplemente una cara bonita, hecho por el que, más que probablemente consiguió el que sería su primer papel en el cine, Thelma & Louise.
La lucha contra ser, simplemente, una cara bonita la ha compartido con Di Caprio, o más recientemente Robert Pattinson. El gran cambio en su carrera llega tres años después de esta cinta, cuando pasa a formar parte del elenco principal de "Entrevista con el Vampiro", juntos a Antonio Banderas y Tom Cruise, tras la cual llegaron algunos de los que a día de hoy siguen considerándose como sus mejores papeles, entre los que destacan cintas tan diferentes como 7 Años en el Tibet, Leyendas de Pasión, Seven, o El Club de la Lucha, en esta última compartiendo protagonismo con el gran Edward Norton.
Toda la carrera de Pitt se caracteriza por una lucha por no encasillarse en un tipo de personaje, variando todos los registros, llegando sin duda a uno de los papeles más complicados de su carrera, con la británica Snatch, en donde se mete en la piel de un gitano, imitando el acento a la perfección.
Sin embargo, su carrera también incluye cintas poco profundas, pero sin duda entretenidisimas, facilmente enmarcables en el género de acción o aventuras. No cabe duda de que estamos hablando de la saga Ocean's Eleven, Twelve y Thirteen, en las que interpreta el papel del típico ladrón de guante blanco, junto con dos de los actores con los que ha peleado por el título de actor más sexy de Hollywood, Matt Damon y George Clooney.
Aún así, la carrera de Brad Pitt también incluye una larga lista de lo que podría llegar a considerarse errores, como su participacion en The Mexican, junto con la novia de América, Julia Roberts, o esa triste adaptación de Ilíada de Homero, en la que interpretó un Aquiles pasado de anabolizantes.
No podemos olvidarnos de la película que dió un giro de 180 grados a su vida sentimental, y que, aunque no se pueda clasificar como un gran film, sin duda fue un éxito de taquilla no debido a la interpretación de los actores, sino a la innegable química existente entre los protagonistas, Brad Pitt y Angelina Jolie, Mr & Mrs Smith.
Puede deberse a ese afán por no encasillarse y buscar siempre papeles nuevos y arriesgados lo que le haya llevado a ponerse a las órdenes de Malik en una oda a la creación divina, más propia de Mel Gibson que de Pitt. Quizá ha podido ser paternidad la que le ha empujado a ponerse en la piel de un padre de familia que trata de buscar, en todo momento, la felicidad de sus hijos, aunque sólo él sabe el verdadero motivo.
En definitiva, a sus 47 años este actor continúa sorprendiendonos, quien sabe, lo mismo cumple sus intenciones y podemos verle en la piel de un homosexual, como él mismo adelantó que le gustaría hacer, tras el estreno de la afamada Brokeback Mountain
By Rules y Estanoche
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